lunes, 12 de julio de 2010

Sensaciones.

Qué tímidos que nos volvemos. Más los que demostramos lo contrario.
Qué cantidad de mentiras que decimos a lo largo de nuestras vidas.
Qué deslumbrante que podemos ser cuando somos felices, cuando esa sonrisa imborrable aparece por un buen tiempo.
Qué opacos que se ven los ojos cuando la tristeza los nubla.
O cuando el placer y la pasión hace hervir cada gota de sangre.
Qué frio que se siente el suelo cuando no hay nadie que acompañe tus pasos.
Con qué velocidad se mueven los dedos en el momento de volcar toda la inspiración y los sentimientos en el teclado o una hoja de papel.
Qué tentadores que se ven los colores de los lápices o las témperas en un día gris.
Qúe reconfortante es un abrazo en ese momento exacto. Y aún más poder soltar las lágrimas en ese mismo instante.
Qué liberación única la música y los movimientos incontrolables.
Qué necesidad de despojarse de cualquier pudor, verguenza y vestimenta. La urgencia de tu calor y sentirte dentro y fuera de mi mente y mi cuerpo. De ver otra vez esa mirada.
Qué belleza tiene la luna, tan pequeña y blanca en el centro de la oscuridad.
Qué hermosas que son las palabras de consuelos, cuando nacen del corazón y la voz que uno desea escuchar.
Qué sensación maravillosa cuando los labios correctos se unen.

1 comentario:

  1. "Qué frio que se siente el suelo cuando no hay nadie que acompañe tus pasos."
    Linda frase, Besos.

    ResponderEliminar